Un cáncer mata a Willy DeVille | El Periódico de Catalunya | CulturaUn cáncer mata a Willy DeVille
- • El autor de ‘Demasiado corazón’ fallece en EEUU a los 55 años
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- El rockero Willy DeVille, en una imagen del año pasado.
EL PERIÓDICO
nueva yorkWilly DeVille se ha unido a Edith Piaf». Con estas palabras, la empresa organizadora de conciertos Caramba Spectacles anunció ayer la muerte de una de sus perlas: el cantante y guitarrista estadounidense Willy DeVille, autor de cientos de temas; entre ellos, la mil veces cantada Demasiado corazón.
DeVille –aunque su verdadero nombre era William Borsey– murió «en paz» durante la noche del pasado jueves, 6 de agosto, en Nueva York. «Su música y su espíritu estarán siempre con nosotros», se leía ayer en su web oficial. El líder del grupo Mink DeVille tenía 55 años y llevaba dos meses luchando contra un cáncer de páncreas. Meses antes le había sido diagnosticada una hepatitis C que agravó su estado de salud. De hecho, había cancelado todos las citas preparadas para este año. Sus seguidores estaban informados de todo gracias a su web, en la que los comentarios médicos iban acompañados una frase demoledora: «El corazón roto».
Nada más conocer la noticia, Caramba Spectacles lanzó un comunicado en el que decía que DeVille se había «unido» a Piaf –la diva francesa que le inspiró y con la que colaboró en El gato azul–, a su productor Jack Nitzsche y a su compañero, el guitarrista Johnny Thunders.
DeVille comenzó su carrera en Nueva York en plena época punk, pero su música se abrió mejor paso en Europa que en su país natal. Su reconocimiento mundial llegó de la mano de su grupo, Mink DeVille, que se deshizo a mediados de los años 80. A finales de la década publicó su primer disco en solitario, Miracle, producido por Mark Knopfler. De hecho, el líder de los Dire Straits versionó una de sus canciones, Storybook love, para incluirla en la banda sonora de la película La princesa prometida. La pieza llegó a conseguir una nominación al Oscar. Para su primer disco en solitario, DeVille también contó con la colaboración del músico de country Chet Atkins.
DANDI Y MARIACHI / DeVille era un artista multidisciplinar. En los 90 adoptó un look entre dandi y mariachi, con el que será siempre recordado. Lucía tupé, llevaba el pelo largo y un bigote fino. Calzaba unas llamativas botas de vaquero y vestía un chaleco igual de llamativo. Tiempo después, dio un paso hacia el rythm & blues, el soul y la salsa, dos estilos muy presentes en sus últimos trabajos, Crow Jane Alley (2004) y Pistola (2008).
DeVille era el mejor ejemplo de músico autodidacta. Sin embargo, el éxito no le sonrió siempre. Cuando, en 1971, decidió marcharse a Londres y convertirse en un profesional de la música, terminó completamente frustrado por la terrible falta de éxito.
Sin embargo, siguió persiguiendo su sueño. Cansado de Londres, hizo las maletas y se volvió a su país natal. Pero esta vez fue a San Francisco, donde consiguió dar conciertos en pequeños locales. Después, decidió probar suerte en Nueva Orleans, cuyos ritmos ya no le abandonaron nunca, y Nueva York. Allí también tuvo un merecido éxito, aunque tuvo bastante más reconocimiento artístico en Europa. Tras varios conciertos en el Olympia de París, se declaró como «un gran amante de Francia».